Libre de plástico

Los productos de plástico tradicionales se fabrican con polímeros derivados del petróleo.

Esto tiene dos consecuencias: la alta demanda de un recurso finito y la creación de un producto que tarda miles de años en descomponerse.

Por el contrario, los productos y el packaging libres de plástico no contienen polímeros, y no es necesario recurrir a este proceso para su fabricación.

El packaging es uno de los productos que más contribuye a la contaminación del planeta, especialmente a la degradación de los ríos, mares y océanos.

Concretamente, el packaging de plástico (fabricado con petróleo o derivados) agrava la contaminación, y tienen un impacto muy negativo en el entorno y en la fauna.

El packaging libre de plástico es una buena opción para las marcas que quieren reducir su impacto medioambiental. Es una buena manera de evitar que cientos de embalajes de plástico inunden los vertederos a diario.

Además, debido a los cambios en la legislación vigente, es posible que muchas marcas tengan que adaptar su modelo de negocio. La ciudadanía está cada vez más informada y concienciada con el medioambiente, y comparte su opinión sobre el tema en Internet. Esta es otra razón de peso para el cambio.

Existen varios casos específicos en los que es necesario usar packaging de plástico: para conservar frescos los alimentos durante un mayor periodo de tiempo (especialmente en regiones afectadas por la hambruna), para preservar medicamentos, productos farmacéuticos o de higiene, o para transportar materiales peligrosos. Asimismo, se puede usar packaging de plástico si se sabe con seguridad este puede reciclarse.

Packhelp incluye en su catálogo diversas opciones de packaging libre de plástico, y anima tanto a las pymes como a las grandes firmas a probar este tipo de envoltorios.

Aunque es cierto que las emisiones de carbono durante la fabricación de packaging de plástico [1] son reducidas, el resultado final es un producto que tarda miles de años en descomponerse, y que puede ser muy perjudicial para los ecosistemas.

Fabricar packaging libre de plástico conlleva esfuerzo y tiempo, pero es un paso imprescindible para minimizar las toneladas de plástico que inundan cada día los vertederos.